top of page

Diabetes en gatos: causas, síntomas y cuidados en el hogar

  • Foto del escritor: VetSağlıkUzmanı
    VetSağlıkUzmanı
  • 23 nov
  • 28 Min. de lectura

¿Qué es la diabetes en los gatos?

La diabetes felina es una enfermedad metabólica crónica causada por la incapacidad del cuerpo para producir suficiente insulina para convertir la glucosa (azúcar en sangre) en energía, o por la incapacidad de utilizar eficazmente la insulina que produce. Normalmente, el páncreas secreta insulina según los niveles de azúcar en sangre, lo que permite que las células utilicen la glucosa como energía. Sin embargo, en los gatos con diabetes, este mecanismo se ve alterado, e incluso si la glucosa se libera en la sangre, no puede ser absorbida por las células. Esto provoca una falta de energía en las células y niveles anormalmente altos de azúcar en sangre.

La diabetes felina es más común en gatos de mediana edad y mayores . La obesidad, la falta de actividad física, las dietas ricas en carbohidratos y ciertos desequilibrios hormonales aumentan significativamente el riesgo de diabetes. Los gatos machos y ciertas razas también son más susceptibles a la enfermedad.

La enfermedad se desarrolla a través de dos mecanismos principales:

  • Deficiencia de insulina : el páncreas no puede producir suficiente insulina.

  • Resistencia a la insulina : el gato produce insulina, pero sus tejidos corporales no responden a la insulina.

Durante este período, un gato puede perder peso, independientemente de la cantidad de alimento que consuma. Al no poder convertir la glucosa en energía, comienza a descomponer rápidamente la grasa y el tejido muscular. Si no se trata, pueden desarrollarse enfermedades del sistema nervioso, crisis metabólicas graves como la cetoacidosis y complicaciones potencialmente mortales.

Cuando la diabetes se diagnostica correctamente y se trata con diligencia, muchos gatos pueden vivir muchos años con buena calidad de vida . La detección temprana, el seguimiento regular y la implementación de estrategias adecuadas de cuidado en casa son los factores más importantes para determinar el éxito en esta enfermedad.

Diabetes en gatos

Tipos de diabetes en los gatos

La diabetes felina se divide en dos tipos principales, similares a los de humanos y perros; sin embargo, la forma más común en gatos es la resistencia a la insulina. Comprender los tipos es crucial para determinar el tratamiento adecuado.

Diabetes tipo 1 (diabetes por deficiencia de insulina)

En esta forma, el páncreas no produce suficiente insulina debido a la pérdida o disfunción de las células beta. Es menos común en gatos que en perros. Los procesos autoinmunes o los daños graves al páncreas (como la pancreatitis) se encuentran entre las principales causas de este tipo. Esta forma suele requerir terapia con insulina de por vida .

Diabetes tipo 2 (diabetes resistente a la insulina)

Es el tipo más común de diabetes en gatos. En esta afección, el páncreas produce insulina, pero los tejidos corporales no responden. Este tipo suele estar asociado a los siguientes factores:

  • Obesidad

  • Actividad física insuficiente

  • Alimentos comerciales ricos en carbohidratos

  • Resistencia a la insulina debido al uso de corticosteroides o progestina

En algunos gatos, la diabetes tipo 2 puede remitir (mejorar) con el tratamiento temprano adecuado. Esto significa que el gato puede vivir sin necesitar insulina durante un tiempo. Sin embargo, esto requiere una dieta equilibrada, una terapia de insulina adecuada y un control riguroso de la glucosa.

Diabetes secundaria

En algunos gatos, el mecanismo de la insulina se altera debido a otras enfermedades subyacentes. Esto se denomina "diabetes secundaria". Las causas más comunes son:

  • pancreatitis crónica

  • síndrome de Cushing

  • Hipertiroidismo

  • Terapia con cortisona a largo plazo

  • Exposición excesiva a la progesterona (supresores del estro)

En estos gatos, la diabetes no puede curarse por completo sin corregir la causa subyacente. El plan de tratamiento debe abordar tanto la diabetes como la comorbilidad.

Diabetes en gatos

Causas de la diabetes en los gatos

El desarrollo de la diabetes en gatos se debe a una combinación de factores. La enfermedad no suele deberse a una sola causa; una combinación de influencias metabólicas, hormonales y ambientales puede afectar la producción de insulina o su eficacia. Por lo tanto, la diabetes es cada vez más común, especialmente en gatos de mediana edad y mayores. A continuación, se describen los factores más críticos que contribuyen al desarrollo de la diabetes en gatos.

Obesidad y exceso de grasa corporal

La obesidad es el desencadenante más potente de la diabetes tipo 2 en gatos. A medida que aumenta el tejido adiposo, disminuye su sensibilidad a la insulina. Esta condición se denomina "resistencia a la insulina" y provoca que el páncreas produzca más insulina. Cuando el páncreas no puede gestionar esta carga durante un tiempo prolongado, las células beta se agotan y la producción de insulina disminuye, lo que provoca diabetes.

En los gatos de interior, el sedentarismo, la alimentación constante y libre y el pienso alto en carbohidratos aumentan rápidamente la obesidad. Por lo tanto, el control de peso es un factor tanto preventivo como terapéutico.

Pancreatitis y daño pancreático

La pancreatitis crónica o recurrente es una causa importante de diabetes en gatos. El páncreas es un órgano que produce enzimas digestivas e insulina. Cuando se produce una infección, inflamación o daño celular en este órgano, las células beta secretoras de insulina se debilitan. Con el tiempo, los niveles de insulina disminuyen y los niveles de glucosa en sangre comienzan a aumentar de forma descontrolada.

Trastornos hormonales

Algunas enfermedades endocrinas afectan directamente la función de la insulina y aceleran el desarrollo de la diabetes:

  • Hipertiroidismo : aumenta la tasa metabólica del cuerpo y aumenta los requerimientos de insulina.

  • Síndrome de Cushing (hiperadrenocorticismo) : el exceso de cortisol provoca resistencia a la insulina.

  • Acromegalia (exceso de hormona del crecimiento) : Es una de las causas más importantes de resistencia a la insulina, especialmente en gatos machos.

En los gatos en los que no se tratan estas enfermedades, el control de la diabetes se vuelve muy difícil.

Uso de cortisona y progesterona

El tratamiento prolongado con corticosteroides (medicamentos que contienen cortisona) altera el equilibrio glucémico en gatos. La cortisona aumenta la liberación de glucosa del hígado y reduce la respuesta tisular a la insulina. De igual manera, las progestinas (derivados de la progesterona) presentes en los supresores del estro pueden inducir resistencia a la insulina central, lo que puede provocar diabetes.

Estos medicamentos deben utilizarse sólo en casos necesarios y bajo supervisión.

Vejez

A medida que los gatos envejecen, su metabolismo cambia de forma natural. La respuesta celular a la insulina disminuye, la función pancreática se ralentiza y aumenta la tendencia a la inflamación crónica. Por lo tanto , el riesgo de diabetes aumenta significativamente en gatos mayores de 10 años .

Género (los gatos machos son más propensos)

Los estudios muestran que los gatos machos son más propensos a la diabetes que las gatas, en parte debido a las diferencias hormonales y al hecho de que los gatos machos tienen un mayor peso corporal en promedio.

Estilo nutricional

El alimento seco rico en carbohidratos, los comederos siempre accesibles, la alimentación incontrolada con comidas caseras y un perfil proteico bajo contribuyen al desarrollo de la diabetes. Los gatos son carnívoros biológicamente adaptados a dietas bajas en carbohidratos; por lo tanto, el exceso de carbohidratos aumenta el estrés metabólico.

Predisposición genética y racial

Algunas razas de gatos son más propensas a desarrollar diabetes que otras. Esto se debe a que factores como el metabolismo hormonal, la sensibilidad a la insulina y la estructura corporal varían según la raza. He incluido una lista detallada de estos factores en formato de tabla en el siguiente apartado.

Diabetes en gatos

Razas propensas a la diabetes en gatos

La siguiente tabla muestra las razas de gatos con predisposición a la diabetes y sus niveles de riesgo. El formato de la tabla se ha elaborado de acuerdo con nuestras directrices.

Tabla: Raza | Nivel de predisposición

Raza de gato

Nivel de predisposición

birmano

Mucho

siamés

Mucho

Tonkinés

Mucho

Medio

Maine Coon

Medio

Medio

Esfinge

Medio

persa

Pequeño

Pequeño

Pequeño

Esta cifra se basa tanto en factores genéticos como en observaciones clínicas prácticas. El riesgo es aún mayor en razas propensas a la obesidad. Razas como el birmano y el siamés se clasifican como "muy" porque sus mecanismos de resistencia a la insulina son más pronunciados.

Diabetes en gatos

Síntomas de diabetes en gatos

Los síntomas de diabetes en gatos suelen comenzar de forma lenta e insidiosa. Muchos gatos parecen tener un comportamiento normal en las primeras etapas de la enfermedad; por lo tanto, para cuando los dueños notan los síntomas, la enfermedad suele estar avanzada. Las características más distintivas de la diabetes son el cuadro clínico de niveles altos de azúcar en sangre (hiperglucemia) y la presencia de azúcar en la orina (glucosuria).

Los síntomas se describen en detalle a continuación:

Consumo excesivo de agua (polidipsia)

Cuando los niveles de glucosa en sangre aumentan, los riñones intentan excretar este azúcar a través de la orina. Al pasar la glucosa a la orina, se crea un efecto osmótico y los riñones absorben más agua. Por eso, los gatos con diabetes beben mucha más agua de lo habitual. Su bebedero se vacía rápidamente, pueden buscar agua con regularidad y pueden notar que beben con más frecuencia que antes.

Micción excesiva (poliuria)

La polidipsia provoca que los gatos orinen con mayor frecuencia y en mayor cantidad. La caja de arena se llena más rápido, la cantidad de arena aglomerada aumenta y algunos gatos pueden empezar a preferir diferentes lugares de la casa para orinar. Esto es una consecuencia natural de los esfuerzos de los riñones por eliminar la glucosa.

Aumento del apetito (polifagia)

Los gatos con diabetes experimentan hambre constante porque no obtienen suficiente energía. Como sus células no pueden utilizar la glucosa, no se sienten saciados ni siquiera si comen más. Esto se manifiesta inicialmente como un aumento excesivo del apetito.

Pérdida de peso

La pérdida de peso, a pesar del aumento del apetito, es uno de los síntomas más típicos de la diabetes. Cuando las células no pueden convertir la glucosa en energía, el cuerpo comienza a descomponer rápidamente la grasa y el tejido muscular para obtenerla. En etapas moderadas y avanzadas de la diabetes, la pérdida muscular se acentúa y el gato puede desarrollar una apariencia demacrada y huesuda.

Debilidad, malestar y debilitamiento de la estructura muscular.

La falta de energía, la incapacidad del cuerpo para utilizar la glucosa y la pérdida de masa muscular pueden hacer que los gatos se sientan cansados y con poca energía. Comportamientos como dormir más durante el día, la reticencia a jugar y la reducción del aseo son comunes.

Mala calidad del cabello y problemas de la piel

El desequilibrio energético y la deshidratación pueden provocar enredos, aumento de la muda, aspecto descuidado, caspa y piel sensible. A medida que disminuye el aseo personal del gato, la textura del pelaje se vuelve irregular.

Debilidad en las patas traseras (neuropatía diabética)

En la diabetes crónica no controlada, la cantidad de glucosa que llega a los nervios aumenta y las células nerviosas pueden dañarse. Esta afección se conoce como "neuropatía diabética". Los gatos presentan síntomas como incapacidad para levantar completamente las patas traseras y una postura plantígrada, caminando con las patas planas en lugar de sobre ellas.

Vómitos y pérdida de apetito (en etapas avanzadas)

En casos no controlados, la incapacidad de convertir la glucosa en energía provoca un aumento en la producción de cetonas. Las cetonas pueden causar náuseas, vómitos y pérdida grave de apetito. Este es el inicio de una crisis como la cetoacidosis diabética (CAD), que requiere intervención inmediata.

Cambios de comportamiento en los gatos

Se pueden observar cambios de comportamiento como inquietud, esconderse, orinar fuera de la caja de arena, inquietud nocturna y reticencia a jugar. Los dueños suelen confundir estos cambios con el envejecimiento.

Si se observan uno o más de estos síntomas, se debe evaluar al gato de inmediato. El diagnóstico temprano de la diabetes permite controlar mejor la enfermedad y aumentar las probabilidades de remisión.

Diagnóstico de la diabetes en gatos

El diagnóstico de diabetes en gatos se basa en la evaluación de los signos clínicos, los hallazgos de laboratorio y un examen veterinario completo. El proceso diagnóstico no se limita a la simple medición de la glucemia; también deben considerarse afecciones como la hiperglucemia por estrés, que simulan la diabetes. Por lo tanto, es necesario un enfoque multifacético para un diagnóstico preciso.

A continuación se muestra una explicación detallada de cómo se diagnostica la diabetes en los gatos:

Observación de síntomas clínicos

Síntomas como polidipsia, poliuria, pérdida de peso, aumento del apetito y deterioro de la calidad del pelaje son importantes en la evaluación inicial. Estos síntomas pueden indicar diabetes, pero también pueden observarse en algunas enfermedades renales y trastornos tiroideos, por lo que es esencial realizar análisis de laboratorio detallados.

Medición de glucosa en sangre (detección de hiperglucemia)

Los niveles de azúcar en sangre en gatos con diabetes suelen ser muy superiores a los normales. Sin embargo, pueden experimentar hiperglucemia temporal cuando están estresados, por lo que una sola medición no es suficiente para realizar un diagnóstico.

Se realizan pruebas adicionales para respaldar los hallazgos de hiperglucemia crónica (continua):

Prueba de fructosamina

La fructosamina indica la cantidad de glucosa unida a las proteínas sanguíneas y refleja el equilibrio glucémico durante las últimas 2 a 3 semanas. Esta prueba es uno de los métodos de diagnóstico más fiables en gatos, ya que distingue entre elevaciones temporales de glucosa inducidas por estrés.

Análisis de orina (glucosuria y cetonuria)

Los gatos diabéticos suelen presentar glucosa en la orina porque sus riñones empiezan a excretar niveles altos de azúcar en la sangre a través de la orina. La presencia de azúcar en la orina plantea la sospecha de diabetes. Si también se observan cetonas en la orina, la afección es más grave y existe el riesgo de desarrollar cetoacidosis.

Hemograma completo y panel bioquímico

Se examinan un hemograma completo , enzimas hepáticas, valores renales y electrolitos para identificar afecciones subyacentes que acompañan o desencadenan la diabetes. Se evalúan en particular la pancreatitis, el hipertiroidismo, los problemas hepáticos relacionados con la obesidad y las infecciones.

Ultrasonido e imágenes adicionales

La pancreatitis, los tumores, las hipertrofias de órganos y los problemas metabólicos pueden examinarse mediante ecografía durante el diagnóstico. Esto es especialmente importante cuando se sospecha diabetes secundaria.

Diagnóstico diferencial (hiperglucemia por estrés)

Los gatos pueden experimentar aumentos temporales de azúcar en sangre debido al estrés durante las visitas veterinarias. Esta afección se asemeja a la diabetes. La hiperglucemia por estrés suele:

  • No hay glucosa en la orina

  • El valor de fructosamina es normal

Se diferencia de la diabetes con hallazgos como:

Un diagnóstico preciso es fundamental para un tratamiento eficaz y la probabilidad de remisión. El tratamiento nunca debe iniciarse hasta que se confirme el diagnóstico.


Tratamiento de la diabetes en gatos

El tratamiento de la diabetes en gatos no se limita únicamente a la administración de insulina; debido a la naturaleza metabólica de la enfermedad, es necesario implementar conjuntamente el manejo nutricional, el control del peso, la monitorización regular y el cuidado adecuado en casa. El tratamiento de la diabetes es un proceso a largo plazo y, si se gestiona correctamente, la calidad de vida del gato mejora significativamente. En algunos gatos, la remisión —es decir, la eliminación de las necesidades de insulina— es incluso posible con un tratamiento temprano adecuado.

A continuación se describen en detalle todas las etapas del tratamiento de la diabetes en gatos.

Terapia con insulina

El tratamiento principal para la diabetes felina es la insulina. El enfoque terapéutico habitual hoy en día consiste en inyecciones subcutáneas de insulina dos veces al día. Los tipos de insulina utilizados suelen ser formulaciones de acción prolongada o intermedia. Las opciones más comunes son:

  • Glargina (Lantus)

  • PZI (ProZinc)

  • Detemir

Estas insulinas son muy eficaces para mantener un control estable de la glucosa en gatos. Las inyecciones se administran típicamente entre los omóplatos o en la región lumbar lateral. Una vez aprendida la técnica correcta, son extremadamente fáciles de administrar en casa.

Ajuste de dosis

El paso más crítico en la terapia con insulina es el ajuste de la dosis. Una dosis demasiado baja puede provocar un control deficiente de la glucosa, mientras que una dosis demasiado alta puede provocar hipoglucemia. Los ajustes de dosis se realizan mediante los siguientes métodos:

  • Mediciones periódicas de azúcar en sangre

  • Monitoreo regular de glucosa en casa

  • Pruebas de fructosamina

  • El estado general del gato, el apetito y la producción de orina.

Los cambios de dosis nunca deben hacerse al azar. Se deben realizar pequeños ajustes con el tiempo según la respuesta del gato.

Manejo nutricional

La terapia dietética desempeña un papel fundamental en el control de la diabetes. Los gatos son animales carnívoros por naturaleza con una dieta rica en proteínas. Por lo tanto, las dietas para gatos diabéticos incluyen:

  • Alto perfil de proteínas y bajo perfil de carbohidratos

  • Dieta preferiblemente basada en comida húmeda.

  • Dieta controlada en fibra

  • Patrones de alimentación regulares (especialmente sincronizados con la insulina)

La comida húmeda facilita el control de la glucosa en muchos gatos diabéticos porque es más baja en carbohidratos y proporciona una mejor sensación de saciedad.

Control de peso

La obesidad es una de las principales causas de la resistencia a la insulina. Por lo tanto, los gatos con diabetes deben alcanzar un peso corporal saludable. Sin embargo, la pérdida de peso debe ser controlada, no rápida. Una pérdida de peso repentina puede provocar hígado graso (lipidosis hepática).

En el control de peso:

  • Porciones medidas

  • Aumentar el nivel de actividad

  • Alimentos bajos en calorías pero ricos en proteínas

métodos como los que se utilizan.

Monitoreo de azúcar en sangre en casa

El control de glucosa en casa es fundamental para el éxito del tratamiento. Dado que la hiperglucemia por estrés es común en los gatos, las mediciones realizadas en clínicas veterinarias suelen ser engañosas. Por lo tanto, los dispositivos que miden la glucosa en casa con una pequeña gota de sangre (glucómetros) son muy prácticos.

Gracias a la monitorización domiciliaria:

  • La hipoglucemia se detecta precozmente

  • Se monitorean las fluctuaciones diarias

  • Se pueden realizar ajustes de dosis si es necesario.

  • La respuesta del gato al tratamiento se hace más clara.

Tratamiento de enfermedades subyacentes

Afecciones como la pancreatitis, el síndrome de Cushing y el hipertiroidismo pueden desencadenar diabetes. Sin tratamiento, la diabetes se vuelve difícil de controlar. Por lo tanto, siempre es necesaria una evaluación integral.

Posibilidad de remisión (período libre de insulina)

En algunos gatos, la diabetes puede revertirse con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado. Esto se denomina "remisión". Se observa con mayor frecuencia en gatos con diabetes tipo 2 que no presentan obesidad o cuyo peso se controla rápidamente. La probabilidad de remisión es mayor en las siguientes situaciones:

  • Si la diabetes se detecta a tiempo

  • Si está utilizando insulinas de acción prolongada como Glargina

  • Si el gato ha cambiado rápidamente a una dieta baja en carbohidratos

  • Si los niveles de fructosamina en la sangre mejoran rápidamente

Incluso si hay remisión, los controles regulares son esenciales porque la enfermedad puede regresar.

Complicaciones y pronóstico de la diabetes en gatos

La diabetes es una enfermedad crónica que puede causar complicaciones graves si no se controla adecuadamente. Sin embargo, con un diagnóstico temprano, un tratamiento regular y un buen cuidado en casa, la mayoría de los gatos pueden vivir una vida larga y saludable. Las complicaciones suelen deberse a desequilibrios de azúcar en sangre o deficiencia de insulina.

A continuación encontrará información completa sobre todas las complicaciones y el curso de la enfermedad.

Cetoacidosis diabética (CAD)

Es una de las complicaciones más graves de la diabetes. Cuando el cuerpo no puede utilizar la glucosa como fuente de energía, acelera la quema de grasa, produciendo sustancias llamadas cetonas. Cuando los niveles de cetonas alcanzan niveles peligrosos, el metabolismo se acidifica. La CAD se manifiesta con los siguientes síntomas:

  • Debilidad severa

  • Vómitos

  • Deshidración

  • Aliento dulce/metálico

  • Anorexia

  • Pérdida de peso rápida

La CAD requiere atención inmediata y puede ser mortal si no se trata.

Neuropatía diabética

Los niveles de glucosa descontrolados durante un tiempo prolongado pueden dañar las células nerviosas. En los gatos, los nervios de las patas traseras se ven especialmente afectados, lo que provoca un trastorno de la marcha denominado "postura plantígrada". Los gatos caminan con los talones tocando el suelo. Con tratamiento y un buen control de la glucosa, la neuropatía puede remitir en algunos gatos.

Hipoglucemia (nivel bajo de azúcar en sangre)

El exceso de insulina, los horarios de comida irregulares o los ajustes excesivos de la dosis pueden provocar hipoglucemia. Esta afección se manifiesta con los siguientes síntomas:

  • Agitar

  • Mareo

  • Trastorno de coordinación

  • Mirar

  • Desmayo

Por lo tanto, el control de la glucosa en casa es vital. La hipoglucemia es uno de los riesgos más graves del tratamiento de la diabetes en gatos y requiere intervención inmediata.

Susceptibilidad a las infecciones

Cuando el nivel de azúcar en sangre es alto, el sistema inmunitario se debilita. Por lo tanto, los gatos con diabetes:

  • Infección del tracto urinario

  • Infecciones de dientes y encías

  • Infecciones de la piel

son más propensos a problemas como:

Problemas oculares

Las cataratas diabéticas, comunes en perros, son menos comunes en gatos, pero no están completamente ausentes. En algunos gatos, la hiperglucemia prolongada puede provocar alteraciones en el cristalino .

Pronóstico (evolución de la enfermedad)

La esperanza de vida de los gatos con diabetes puede variar considerablemente, dependiendo de la calidad del tratamiento y del seguimiento regular. Con el tratamiento adecuado, muchos gatos:

  • 5–10 años

  • Algunos por más tiempo

Puede seguir viviendo una vida saludable.

Factores que influyen positivamente en el pronóstico:

  • Diagnóstico precoz de la enfermedad

  • Terapia regular con insulina

  • La cetoacidosis nunca se ha desarrollado.

  • dieta baja en carbohidratos

  • Buen control del peso

  • Monitoreo regular de glucosa en casa

  • Control de enfermedades subyacentes

El pronóstico es mucho mejor en los gatos que entran en remisión; sin embargo, no se debe interrumpir el seguimiento regular.


Cuidado y manejo domiciliario de la diabetes en gatos

Para que un gato diabético tenga una vida sana, equilibrada y larga, los protocolos de cuidado en casa son parte integral del tratamiento. La diabetes no es una enfermedad que pueda controlarse únicamente en un entorno clínico; el cuidado diario, la dieta, los horarios de insulina y el control de la glucosa deben realizarse regularmente en casa. Por lo tanto, la comprensión de estos aspectos por parte de los dueños es crucial para el control de la enfermedad.

A continuación se explican detalladamente todos los pasos a seguir en el manejo domiciliario de la diabetes en gatos.

Creación de una rutina de administración de insulina

La insulina se administra generalmente dos veces al día, con un intervalo de 12 horas. La administración de insulina en casa se gestiona de las siguientes maneras:

  • La aplicación debe realizarse a la misma hora todos los días.

  • La inyección se administra debajo de la piel, generalmente entre los omóplatos.

  • Se debe elegir un entorno tranquilo y estable para reducir el estrés del gato durante la aplicación.

  • La insulina nunca debe agitarse, sólo agitarse suavemente (excepto la glargina, que no necesita agitarse).

  • La aguja es para un solo uso y debe desecharse de forma segura después de su aplicación.

Una rutina constante es vital para un progreso estable del tratamiento.

Monitoreo de azúcar en sangre en el hogar y registro diario

Medir la glucosa en casa ofrece muchas ventajas:

  • En las clínicas se previenen los aumentos de glucosa inducidos por el estrés.

  • Las caídas de azúcar en sangre se detectan de forma temprana.

  • La respuesta a la insulina del páncreas se evalúa con mayor precisión.

  • Los ajustes de dosis se realizan con mayor precisión.

Los glucómetros adecuados para gatos se utilizan para el control domiciliario. Una pequeña gota de sangre de la punta de la oreja suele ser suficiente. Todas las mediciones deben registrarse en un cuaderno o una historia clínica digital. Estos registros facilitan los ajustes del tratamiento en la consulta veterinaria.

Nutrición adecuada

Uno de los elementos más importantes del manejo del hogar es el plan de alimentación. Para reducir las fluctuaciones de glucosa en gatos diabéticos, la dieta debe:

  • Alto contenido proteico

  • Bajo en carbohidratos

  • Fórmulas especiales ricas en fibra cuando sea necesario

  • Dieta basada en comida húmeda

  • Determinación de porciones medidas

  • Nutrición compatible con los relojes de insulina

El modelo nutricional más ideal es el de comidas controladas tomadas justo antes o inmediatamente después de la administración de insulina.

Control de peso y aumento de la actividad

Los gatos con sobrepeso son más propensos a desarrollar resistencia a la insulina, lo que dificulta el tratamiento. Por lo tanto, el control de peso en casa debe planificarse:

  • La ingesta calórica diaria está regulada.

  • Los alimentos de recompensa se reducen o se eliminan por completo.

  • Se planifican tiempos de juego para aumentar el nivel de actividad del gato.

  • Se fomenta el movimiento con zonas de escalada, juguetes interactivos o actividades con láser.

La pérdida de peso debe ser lenta y controlada; la pérdida de peso repentina y rápida puede aumentar el riesgo de hígado graso.

Monitoreo del consumo de orina y agua

En gatos diabéticos, el consumo de agua y la producción de orina proporcionan pistas importantes sobre su salud. Se deben realizar las siguientes observaciones en el entorno doméstico:

  • Se debe controlar periódicamente el tiempo que tarda en vaciarse el depósito de agua.

  • La cantidad y el tamaño de los grumos en la caja de arena deben controlarse diariamente.

  • Un aumento o disminución repentina puede requerir una revisión de la dosis de insulina.

Reconociendo los síntomas de emergencia

La clave para el cuidado del hogar es reconocer las primeras señales de malestar. Los propietarios deben estar especialmente atentos a lo siguiente:

  • Temblores, debilidad o pérdida del equilibrio → Signos de hipoglucemia

  • Vómitos, deshidratación grave, respiración rápida → Signos de cetoacidosis

  • Debilidad en las patas traseras → Neuropatía diabética

  • Micción excesiva anormal → Fracaso del tratamiento

Una complicación detectada a tiempo puede salvar la vida de un gato.

Chequeos veterinarios regulares

Los controles clínicos regulares son esenciales para una gestión domiciliaria exitosa:

  • Mediciones de fructosamina

  • Panel de bioquímica

  • Análisis de orina

  • Medición de peso

  • Actualizaciones de dosis

Estos controles suelen realizarse en intervalos de 1 a 3 meses.

La gestión adecuada del proceso de cuidados domiciliarios es el factor más poderoso que determina directamente la comodidad y la esperanza de vida de un gato diabético.

Prevención de la diabetes en los gatos

La diabetes en gatos no es totalmente prevenible, pero el riesgo se puede reducir significativamente con un estilo de vida saludable, una dieta adecuada y revisiones médicas regulares. Muchos factores que desencadenan la diabetes están relacionados con el entorno del gato. Por lo tanto, se deben incorporar medidas preventivas en la rutina diaria del gato.

A continuación se explican todos los métodos científicos, prácticos y eficaces que se pueden aplicar para reducir el riesgo de diabetes.

Mantener un peso saludable

La obesidad es el principal desencadenante de la diabetes. Por lo tanto:

  • Se debe determinar el rango de peso ideal del gato.

  • La ingesta calórica diaria debe ser controlada

  • El consumo de alimentos de recompensa debe ser limitado

  • Se debe aumentar la actividad

Un peso corporal equilibrado reduce drásticamente el riesgo de diabetes.

Modelo de nutrición baja en carbohidratos

La mayoría de los gatos domésticos están biológicamente adaptados a una dieta rica en proteínas y baja en carbohidratos. El alimento seco rico en carbohidratos puede provocar resistencia a la insulina a largo plazo. Para reducir el riesgo:

  • Se deben preferir alimentos sin cereales o con bajo contenido de cereales.

  • Se debe aumentar la proporción de alimento húmedo.

  • Se debe suspender la alimentación libre.

Se debe adoptar un sistema de alimentación planificado para mantener el nivel de azúcar en sangre equilibrado durante todo el día.

Aumentar el movimiento y la estimulación mental

Un estilo de vida pasivo favorece la obesidad. Para aumentar el movimiento:

  • Se deben planificar sesiones de juego diarias.

  • Se deben crear áreas que estimulen el salto, la carrera y la escalada.

  • Se deben utilizar juguetes interactivos.

El metabolismo funciona de forma más saludable en los gatos activos.

Limitar el uso de medicamentos hormonales

Las progestinas, los corticosteroides a largo plazo y algunos reguladores hormonales aumentan el riesgo de diabetes. Estos medicamentos deben usarse solo cuando sea necesario y bajo supervisión veterinaria.

Tratamiento temprano de enfermedades subyacentes

El tratamiento temprano de afecciones como el hipertiroidismo, el síndrome de Cushing o la pancreatitis reduce el riesgo de diabetes. Los gatos con estas afecciones deben ser monitoreados regularmente.

Análisis de sangre regulares para gatos mayores

Los gatos mayores de 10 años corren el riesgo de padecer diabetes. Por lo tanto, al menos una vez al año:

  • Glucemia

  • Fructosamina

  • Funciones renales y hepáticas

  • niveles de hormona tiroidea

Debería comprobarse.

Manejo del estrés y organización del hogar

El estrés crónico puede aumentar el riesgo de diabetes debido al desequilibrio hormonal. Un entorno doméstico tranquilo, ordenado y seguro contribuye directamente a la salud de tu gato.



Situaciones especiales que los propietarios deben conocer

Vivir con un gato diabético requiere dominar ciertas consideraciones especiales que van más allá de las rutinas de cuidado habituales. Esta sección ofrece un análisis detallado de situaciones críticas comunes, consideraciones y soluciones prácticas para el manejo de la diabetes en casa. Esta información es esencial para que los dueños mejoren la calidad de vida de su gato y hagan que el tratamiento sea más seguro.

Manejo del riesgo de hipoglucemia

La complicación más importante de la terapia con insulina es la hipoglucemia. Se produce cuando el nivel de azúcar en sangre baja demasiado y puede ser potencialmente mortal si no se reconoce y trata a tiempo. La hipoglucemia es particularmente común en las siguientes situaciones:

  • Gato comiendo menos de lo normal

  • Sobredosis de insulina

  • Retraso de la comida

  • Demasiado ejercicio

  • Nuevos ajustes de dosis en el tratamiento

Los síntomas básicos para reconocer la hipoglucemia en casa son:

  • Agitar

  • Desequilibrio

  • espasmos musculares

  • Escalonar

  • Confusión

  • Debilidad

  • movimientos similares a convulsiones

Si se observan estos signos, se le debe dar al gato un carbohidrato de acción rápida (por ejemplo, una pequeña cantidad de miel o gel de glucosa) y luego contactar a un veterinario lo antes posible.

Signos tempranos de cetoacidosis

La cetoacidosis diabética (CAD) es una emergencia médica en la que los niveles de azúcar en sangre son demasiado altos y el cuerpo produce cetonas. Las primeras señales de alerta que se deben observar en casa incluyen:

  • Debilidad severa

  • Vómitos

  • Aliento dulce y metálico

  • Sed excesiva

  • Anorexia

  • respiración rápida

La CAD puede progresar rápidamente. Incluso la simple observación de cualquiera de estos síntomas requiere una intervención clínica inmediata.

Manteniendo las rutinas intactas

Los gatos con diabetes son animales que siguen una rutina regular. Administrarse insulina a la misma hora todos los días, tener una alimentación equilibrada y minimizar el estrés son los factores más importantes para mantener la homeostasis de la glucosa.

Cuando se altera la rutina pueden surgir los siguientes problemas:

  • Fluctuaciones de glucosa

  • Debilidad

  • Anorexia

  • micción excesiva

  • Cambios repentinos en el comportamiento

Los propietarios deben planificar con antelación las interrupciones rutinarias, como viajes, cambios de domicilio y una gran cantidad de invitados.

Condiciones de almacenamiento de la insulina

La insulina pierde su eficacia si se almacena incorrectamente. Puntos importantes:

  • Se debe conservar en el frigorífico entre 2 y 8 °C.

  • No debería congelarse.

  • Debe mantenerse alejado de la luz solar directa.

  • El vial no debe agitarse, sólo girarse suavemente.

Las insulinas deterioradas no proporcionan el control de glucosa deseado y pueden provocar que la enfermedad empeore.

Registrar señales y mantener notas periódicas

El gato:

  • Consumo de agua

  • Cantidad de orina

  • Cambios de peso

  • Valores diarios de glucosa

  • Cambios de comportamiento

Toda la información, como por ejemplo: debe registrarse en un cuaderno regular. Estos registros son la herramienta más importante para garantizar un tratamiento lo más preciso posible.

Cuidando su salud bucal y dental

Los gatos con diabetes tienen un mayor riesgo de infecciones orales. La gingivitis, los abscesos y la enfermedad periodontal pueden afectar significativamente la homeostasis de la glucosa. Por lo tanto, las revisiones dentales regulares deben ser una prioridad.

Manejo de Enfermedades Crónicas

La enfermedad renal crónica, la hipertensión, la pancreatitis y los trastornos tiroideos pueden ser más comunes en gatos con diabetes. Por lo tanto, es importante estar atento a los síntomas de estas afecciones y realizar análisis de sangre con regularidad.

Diabetes en gatos: diferencias entre perros y gatos

La diabetes es una enfermedad metabólica que puede presentarse tanto en gatos como en perros; sin embargo, existen diferencias significativas entre ambas especies en cuanto al patrón de la enfermedad, la respuesta al tratamiento, la probabilidad de remisión y la evolución. Comprender estas diferencias es fundamental para un manejo adecuado del tratamiento en gatos.

Las explicaciones detalladas a continuación cubren exhaustivamente cómo se comporta la diabetes en sus dos tipos diferentes.

Tipos de diabetes y diferencias en sus mecanismos básicos

En los gatos, la diabetes se caracteriza con mayor frecuencia por la diabetes tipo 2. En esta afección, la producción de insulina está presente, pero los tejidos corporales no pueden responder a ella; en otras palabras, predomina la resistencia a la insulina. Los perros, por otro lado, suelen experimentar diabetes tipo 1 , en la que el páncreas prácticamente no produce insulina. Por lo tanto, la terapia con insulina de por vida es esencial en los perros.

Probabilidad de remisión

Una de las diferencias más obvias entre estos dos tipos es la posibilidad de remisión:

  • La remisión es posible en gatos. Las necesidades de insulina pueden desaparecer por completo, especialmente en gatos que inician la glargina tempranamente, mantienen una dieta baja en carbohidratos y logran un control de peso rápido.

  • La remisión casi nunca se observa en los perros porque la producción de insulina en el páncreas se ve afectada de forma permanente.

Edad de aparición de la enfermedad y factores asociados

En los gatos, la diabetes suele comenzar en la mediana edad o en la vejez. Los factores de riesgo más importantes incluyen la obesidad, la resistencia a la insulina y los desequilibrios hormonales. En los perros, la diabetes suele aparecer en la mediana edad y suele estar asociada a procesos autoinmunes o daño pancreático.

Opciones de insulina

Si bien las insulinas de acción prolongada, como la glargina y la PZI, ofrecen una alta tasa de éxito en gatos, generalmente se prefiere la insulina NPH o la insulina lenticular en perros. Los gatos responden con mayor sensibilidad a los diferentes tipos de insulina; por lo tanto, los cambios de dosis deben realizarse con mayor cuidado.

Evolución de los síntomas clínicos

En los gatos, la enfermedad comienza de forma más insidiosa; el consumo de agua, el aumento del apetito y el deterioro de la calidad del pelaje progresan lentamente. En los perros, la aparición suele ser más rápida y se produce una pérdida de peso significativa desde el principio.

Desarrollo de cataratas

Esta diferencia es bastante sorprendente:

  • Las cataratas diabéticas son muy comunes en los perros y generalmente se desarrollan rápidamente.

  • Las cataratas diabéticas son muy raras en los gatos.

Por lo tanto, el seguimiento ocular es aún más crítico en los perros.

Dificultad para monitorear y gestionar el tratamiento

Dado que las fluctuaciones de glucosa inducidas por el estrés son más pronunciadas en los gatos, el diagnóstico y la monitorización del tratamiento pueden ser más difíciles. Los gatos también son más susceptibles al estrés en el ámbito clínico, lo que puede provocar lecturas inexactas de hiperglucemia.

Este problema es menos común en los perros y el control de la glucosa proporciona resultados más estables.

En conclusión

La diabetes felina difiere significativamente de la canina, tanto en sus mecanismos biológicos como en la respuesta al tratamiento. El tratamiento puede ser más prometedor en gatos, ya que la remisión es posible con un manejo adecuado; sin embargo, el control de la glucosa, la selección adecuada de insulina y el seguimiento veterinario regular son fundamentales en ambas especies.


Preguntas frecuentes sobre la diabetes en gatos


¿Se puede curar completamente la diabetes en los gatos?

En algunos casos, la diabetes felina puede remitir con el tratamiento adecuado, lo que significa que el gato puede sobrevivir sin insulina durante un tiempo. Esto es especialmente cierto en gatos con diabetes tipo 2 que no presentan obesidad o cuya obesidad se controla rápidamente. La remisión se logra mediante una dieta baja en carbohidratos, el uso temprano de insulinas de acción prolongada como la glargina, una dosificación precisa y un control regular de la glucemia. Sin embargo, incluso en remisión, se deben realizar revisiones periódicas, ya que la enfermedad puede reaparecer.

¿Cuánto tiempo puede vivir un gato diabético?

Los gatos diagnosticados a tiempo y tratados con la terapia de insulina adecuada pueden vivir una vida sana durante muchos años. La mayoría de los gatos con diabetes viven de 5 a 10 años o más. La prevención de complicaciones, el control regular de la glucosa, el control de la dieta y el manejo de las enfermedades subyacentes influyen directamente en la esperanza de vida.

¿Cómo sé si mi gato tiene diabetes?

Los síntomas más comunes son consumo excesivo de agua, micción frecuente, aumento del apetito, pérdida rápida de peso, debilidad y una disminución significativa de la calidad del pelaje. En la diabetes avanzada también se observa debilidad en las patas traseras y marcha plantígrada. Si se presenta al menos uno de estos síntomas, se deben realizar análisis de sangre y orina.

¿Puede un gato diabético sobrevivir sin insulina?

La terapia con insulina es esencial para la mayoría de los gatos con diabetes. Si no se trata, la incapacidad de la glucosa para entrar en las células puede provocar complicaciones graves, como cetoacidosis o daño orgánico. Los gatos en remisión pueden estar temporalmente libres de insulina, pero esto no es permanente y requiere monitoreo regular.

¿Qué pasa si le doy insulina a mi gato en el momento equivocado?

Un cambio en el horario de administración de insulina puede alterar la homeostasis de la glucosa. Si bien los retrasos muy breves no suelen ser un problema, incluso retrasos de unas pocas horas pueden causar hiperglucemia. Nunca se deben administrar dosis dobles. La rutina debe mantenerse, reanudándose en la siguiente hora programada.

¿Cuáles son los síntomas de la hipoglucemia en gatos diabéticos?

Temblores, debilidad, espasmos musculares, mareos, pérdida de coordinación, convulsiones y confusión son los principales síntomas de la hipoglucemia. Esta es una situación urgente. Aplicar una pequeña cantidad de miel en la boca del gato puede ser una solución temporal, pero se debe contactar a un veterinario de inmediato.

¿Qué alimento se le debe dar a los gatos diabéticos?

Los alimentos con una proporción alta de proteínas y baja de carbohidratos son la mejor opción. La comida húmeda proporciona un perfil de glucosa más equilibrado para muchos gatos diabéticos. Se prefieren las recetas sin cereales o bajas en carbohidratos. Las comidas deben estar alineadas con los horarios de administración de insulina.

El apetito de mi gato ha aumentado mucho, ¿es esto un síntoma de diabetes?

Sí. En los gatos con diabetes, el cuerpo sufre una constante falta de energía porque sus células no pueden utilizar la glucosa, y el gato parece muy hambriento. Si la pérdida de peso continúa a pesar de esto, es muy probable que padezca diabetes.

Mi gato ha perdido mucho peso. ¿Podría estar relacionado con la diabetes?

Sí. La pérdida de peso a pesar del aumento del apetito es el síntoma más típico de la diabetes. Dado que la glucosa no se convierte en energía, el cuerpo quema rápidamente grasa y tejido muscular. La pérdida visible de masa muscular y ósea son signos de diabetes avanzada.

¿La neuropatía diabética es temporal?

La neuropatía puede resolverse parcialmente si se detecta a tiempo y se controla rápidamente la glucemia. Sin embargo, la diabetes a largo plazo y sin controlar puede provocar daño nervioso permanente. El pie plano y la marcha en talón son signos de neuropatía.

¿Podría la diabetes ser genética?

Ciertas razas presentan un riesgo significativamente mayor de diabetes. Los birmanos, siameses y tonkineses son los más susceptibles. Si bien existe una predisposición genética, factores ambientales como la obesidad, la inactividad y una dieta rica en carbohidratos también influyen significativamente en el desarrollo de la enfermedad.

¿Qué provoca el consumo excesivo de agua en los gatos?

Un nivel alto de azúcar en sangre hace que los riñones excreten glucosa en la orina. Dado que la glucosa arrastra agua al pasar a la orina, el gato bebe mucha agua. Este es uno de los primeros signos de diabetes.

¿Por qué es necesaria una prueba de fructosamina para el diagnóstico de diabetes?

La prueba de fructosamina indica el nivel promedio de glucosa de las últimas 2 a 3 semanas y distingue la hiperglucemia por estrés, común en gatos. Por lo tanto, es muy fiable para el diagnóstico. Una sola medición de glucosa en sangre puede ser engañosa en gatos.

¿Los gatos mayores son más propensos a la diabetes?

Sí. A medida que envejecemos, la función pancreática se deteriora, la sensibilidad a la insulina disminuye y el metabolismo cambia. Además, los problemas relacionados con la diabetes, como la enfermedad tiroidea y la pancreatitis, son más comunes en gatos mayores.

¿Cómo se debe controlar la diabetes en casa?

El control diario del azúcar en sangre, el consumo de agua y la producción de orina, y el registro del comportamiento general de su gato son partes esenciales del control de la diabetes en casa. Llevar registros regulares facilita el ajuste de la dosis.

Mi gata ha empezado a perder el apetito. ¿Podría ser un síntoma de diabetes?

La pérdida de apetito puede ocurrir en etapas avanzadas de la diabetes o al inicio de la cetoacidosis. Es necesaria una evaluación urgente, especialmente si se acompaña de vómitos, debilidad o disminución del consumo de agua.

¿Es posible detectar la cetoacidosis en casa?

Sí. Los principales síntomas de la cetoacidosis son vómitos, deshidratación, aliento dulce y metálico, debilidad intensa, respiración acelerada y pérdida de apetito. Esta afección puede empeorar en cuestión de minutos, por lo que si experimenta síntomas, debe buscar atención médica de inmediato.

¿Puede el estrés desencadenar la diabetes?

Aunque no es un desencadenante directo, el estrés crónico puede afectar el metabolismo, provocando niveles elevados de glucosa. Además, los gatos estresados pueden experimentar niveles de azúcar en sangre falsamente altos, lo que dificulta el diagnóstico. El estrés aumenta el riesgo de diabetes debido a cambios en el apetito, disminución de la actividad y aumento de peso.

¿La castración aumenta el riesgo de diabetes?

La esterilización por sí sola no causa diabetes; sin embargo, puede desarrollarse obesidad después del procedimiento debido al aumento del apetito y la disminución de la actividad. La obesidad puede suponer un riesgo indirecto, ya que aumenta la resistencia a la insulina. Una dieta equilibrada y ejercicio regular pueden mitigar este riesgo.

¿Cómo se deben realizar los cambios de alimentación en los gatos diabéticos?

Se deben evitar las transiciones repentinas y se debe implementar un plan de transición de al menos siete días. La nueva fórmula debe ser baja en carbohidratos y alta en proteínas. Los horarios de las comidas deben ajustarse a los horarios de administración de insulina.

¿Son los problemas dentales más comunes en los gatos diabéticos?

Sí. Un nivel alto de azúcar en la sangre debilita el sistema inmunitario, lo que aumenta el riesgo de gingivitis, enfermedad periodontal e infecciones bucales. La salud bucal es crucial para el control de la diabetes; no se deben descuidar las revisiones dentales regulares.

¿Qué medicamentos pueden desencadenar el desarrollo de la diabetes?

El uso prolongado de fármacos supresores del estro a base de cortisona y progesterona puede provocar resistencia a la insulina. Estos medicamentos deben usarse solo cuando sea necesario y bajo estricta supervisión veterinaria.

¿Se pueden dar golosinas a los gatos diabéticos?

Se puede administrar, pero de forma muy controlada. Se deben evitar las recompensas ricas en carbohidratos; se deben utilizar recompensas a base de carne y naturales, bajas en carbohidratos. El exceso de recompensas puede alterar la dieta y afectar el equilibrio de la glucosa.

¿Los gatos diabéticos deben tener siempre acceso al agua?

Sí. Los gatos diabéticos consumen más agua de lo normal. El bebedero debe mantenerse lleno y se debe controlar el consumo diario. Un consumo excesivo es señal de que el tratamiento ha fracasado.

¿Por qué son comunes las infecciones del tracto urinario en los gatos diabéticos?

La presencia de glucosa en la orina crea un entorno propicio para la proliferación bacteriana. Por lo tanto, los gatos diabéticos son más propensos a sufrir infecciones del tracto urinario. Los análisis de orina regulares y el tratamiento temprano son cruciales.


Palabras clave

Diabetes felina, síntomas de diabetes en gatos, tratamiento de la diabetes en gatos, cuidado de gatos diabéticos, manejo de insulina en gatos

Fuentes

  • Asociación de aficionados a los gatos (CFA)

  • La Asociación Internacional de Gatos (TICA)

  • Asociación Médica Veterinaria Estadounidense (AVMA)

  • Clínica Veterinaria Mersin Vetlife – Abrir en el mapa: https://share.google/XPP6L1V6c1EnGP3Oc





Comentarios


Todo el contenido de Vetsaglik.com es informativo y se basa en recursos veterinarios científicos, actualizados y de expertos. Las fuentes utilizadas se identifican claramente al final de cada artículo.

La información aquí contenida no pretende ser un diagnóstico, tratamiento ni medicación, ni sustituye una consulta veterinaria. Consulte siempre a su veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento definitivos para la salud de su mascota.

Si existe alguna discrepancia entre la información de nuestro sitio web y las recomendaciones de su veterinario, prevalecerán estas últimas. Si observa alguna discrepancia, contáctenos e infórmenos.

Este sitio tiene como objetivo proporcionar información precisa y científica al público sobre la salud de las mascotas; la publicidad, el patrocinio o las recomendaciones de productos no impiden este propósito.
 

Declaración de accesibilidad

política de privacidad

Sobre nosotros

Comunicación

 

 

bottom of page